Fibras Musculares: Resistencia y Fuerza

Las fibras musculares pueden ser de contracción lenta y de contracción rápida, y un mismo músculo puede contener de ambas.

Fibras de contracción lenta

Se denominan también de músculo rojo, porque poseen alta concentración de mioglobina (moléculas fijadoras de O2), muchas mitocondrias y con gran irrigación (vasos sanguíneos); su contracción aislada produce baja tensión y se desarrolla lentamente. Estas fibras poseen gran reserva de glucógeno y grasa, y una gran producción de ATP, por ello son resistentes a la fatiga.

¿Quiénes poseen musculatura abundante en fibras de contracción lenta?

Los músculos de las piernas y brazos de los campeones de maratón, de natación, de ciclismo, de esquí, es decir, aquellos ejercicios que exigen un trabajo aeróbico prolongado (requiere mucho oxígeno), donde es importante la resistencia.

Fibras de contracción rápida

Se denominan también de músculo blanco, porque poseen escasa mioglobina, bajo número de mitocondrias y vasos sanguíneos. Estas fibras desarrollan una tensión máxima con gran rapidez y esa tensión alcanza niveles más altos que la musculatura de contracción lenta, pero se fatigan pronto.

La miosina de las fibras de contracción rápida tiene alta actividad de ATPasa, de allí que pueden poner a funcionar la energía del ATP rápidamente, pero estas fibras no pueden reabastecerse del ATP lo bastante rápido como para sostener la contracción por mucho tiempo.

En resumen las fibras de contracción rápida son excelentes para realizar trabajos breves que requieren una fuerza máxima, como el caso del levantamiento de pesas o carreras de corta distancia.

¿QUÉ DETERMINA LA PREPARACIÓN DE FIBRAS DE CONTRACCIÓN RÁPIDA Y LENTA EN LOS MÚSCULOS ESQUELÉTICOS?

El factor más importante es el factor hereditario, sin embargo, se puede alterar la preparación en cierta medida a través del entrenamiento, pero este entrenamiento no llevará a formar campeones si no se tiene el factor genético.